Por Ignacia Córdova
¿Qué pasaría si nuestro cerebro pudiese recopilar, recordar y analizar toda la información que han visto nuestros ojos durante la vida? Cada color, forma, textura, todas las facciones de las personas, todas las irregularidades en las calles donde caminamos a diario o todos los precios de las bencineras en nuestro camino al trabajo. Probablemente, nuestra existencia sería mucho más fácil ya que podríamos utilizar esta información para detectar patrones usualmente indetectables. Por ejemplo, ¿Cuál será la mejor ruta para viajar en fechas especiales? Quizás, podríamos determinar la estrategia óptima al jugar Poker con nuestros amigos.
Nuestro cerebro, lamentablemente, posee un tipo de neuronas que llamamos “Neuronas Inhibitorias» cuya función es filtrar la información recibida para quedarse con lo más relevante, con el fin de lograr la supervivencia. La buena noticia es que, mediante las herramientas computacionales existentes, hoy se puede almacenar y procesar gran cantidad de información con el propósito de utilizarla para tomar mejores decisiones.
Esto es lo que hace la aclamada analítica avanzada. Por medio de diversas metodologías como, Inteligencia Artificial, Machine Learning y Optimización, podemos aprovechar la gran cantidad de datos que disponemos (Big Data) y predecir eventos o detectar patrones, con el objetivo de ayudarnos en la toma de decisiones. Esta tecnología hace posible que las organizaciones preparen mejores respuestas y actúen basándose en planes y pronósticos más exactos.
Existen diversas técnicas de analítica avanzada. Algunas técnicas nos explican qué ha pasado con un cierto proceso o sistema y por qué (analítica descriptiva y de diagnóstico), otras transforman nuestros datos y nos muestran qué pasará en el futuro con el proceso (predictiva), mientras que las técnicas más avanzadas, nos dan las instrucciones precisas para llegar a un escenario deseado (prescriptiva).
Pero, ¿En qué áreas puedes aplicar la analítica avanzada en tu empresa? El potencial es inmenso y está presente en todas las áreas de la compañía: operaciones, logística, servicio al cliente, marketing e incluso en finanzas. Algunos ejemplos en los que podríamos ocupar analítica avanzada son: prevención de riesgos, detección de fallas y fraudes, la gestión de personal, la segmentación y clasificación de clientes, la identificación de patrones de comportamiento, entre otros.
Muchas empresas reconocidas utilizan el análisis avanzado para poder mejorar sus procesos. Por ejemplo, Uber optimiza las rutas de circulación en las ciudades para que sus clientes lleguen más rápido a su destino y Amazon analiza y detecta tendencias para construir su propia línea de productos. En el área de la salud, el Hospital de Toronto utiliza esta herramienta para monitorizar bebés en la unidad neonatal. Por medio de un algoritmo, analizan los latidos y el patrón de respiración, pudiendo predecir infecciones 24 horas antes de que aparezcan los síntomas.
Si bien, estos resultados no los podemos obtener solo con nuestro cerebro, Notus puede ayudar a tu organización, mediante algunas de estas tecnologías, a llegar a los resultados esperados de forma inteligente, y así, transformar digitalmente tu empresa.
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