Por Ignacia Córdova
Seguro has jugado, o al menos oído hablar de Los Sims, Animal Crossing o Goat Simulator. Estos son algunos de los juegos de simulación más conocidos en la actualidad. En ellos podemos replicar la vida real y tomar decisiones sin pensar en las consecuencias. Por ejemplo, en Los Sims podemos construir nuestra casa soñada sin gastar un peso y en Animal Crossing podemos vivir en un pueblo donde sus habitantes son animales. Estas situaciones son impensables en la vida real, pero podemos lograrlas mediante la magia de la simulación.
Al contrario de lo que podríamos creer, el comienzo de los simuladores no fue hace tanto tiempo. Todo empezó en la Segunda Guerra Mundial donde se usaban los primeros equipos para enseñar a los futuros militares a volar aviones sin necesidad de arriesgar su vida. Luego, una versión de este equipo saltó al mundo del entretenimiento y se convirtió en la famosa consola Atari 2600.
¿Qué es un modelo de simulación?
Desde ese momento, la simulación ha estado presente, no solo en el ámbito del entretenimiento o aprendizaje, sino que en varias otras áreas. Para comprender mejor el concepto debemos entender lo que es un modelo. En palabras simples, un modelo es una forma de representación de la realidad que sirve para estudiarla de manera más simple. Por otro lado, la palabra “Simular” implica la modelación de un proceso o sistema, de tal forma que este modelo imite las respuestas de la realidad en eventos que ocurren a lo largo del tiempo.
Es por esto, que la simulación y la modelación van de la mano. Podemos decir que, un “modelo de simulación” es una representación de la realidad que se realiza para predecir el comportamiento de un sistema bajo ciertos escenarios. Quizás hayas visto la serie “What if?” de Marvel donde se exploran líneas de tiempo alternativas en el multiverso y se muestra lo que sucedería si los momentos importantes de las películas del universo cinematográfico ocurrieran de manera diferente. Algo así, es trabajar con modelos de simulación.
¿Cuáles son las ventajas de simular?
Gracias a los modelos de simulación, podemos ahorrarnos el tiempo y dinero de tomar decisiones que pueden tener un mal resultado, al plasmar la realidad en un entorno computacional y hacer todas las elecciones que creamos convenientes sin tener consecuencias en la vida real. Si pensamos en un ejemplo más concreto, imaginemos la simulación de una planta de producción de Play Station. Su simulación involucraría la construcción de un modelo matemático donde habría que tener en cuenta: la llegada de materia prima, los diferentes turnos de los operarios, las órdenes de producción de los diversos tipos de productos, los repuestos disponibles para piezas que tienden a fallar, entre muchas otras variables.
Luego, esta modelación se traspasa a un entorno computacional donde podemos ver a través del tiempo lo que ocurre con las decisiones que tomamos. ¿Qué pasaría si solo trabaja hoy la mitad del turno o si hay el doble de camiones disponibles para el despacho? También podemos preguntarnos cómo afectaría en el calendario de despacho si ocurre un atraso en las materias primas por un paro en el puerto de Shanghai.
¿Cómo utilizar modelos de simulación en tu empresa?
Muchas empresas han utilizado modelos de simulación en sus procesos. Por ejemplo, hace algunos años ayudamos a CCU a optimizar el flujo de camiones en uno de sus principales centros de distribución. Mediante un modelo de simulación, pudieron determinar el impacto de modificar el horario de salida de los camiones, la flota y recursos necesarios en el picking, packing y carga de camiones para aumentar el cumplimiento de sus despachos.
Si bien, no somos una empresa de desarrollo de juegos, somos expertos en desarrollar modelos de simulación. Mediante esta metodología, en Notus podemos evaluar nuevos negocios, realizar estudios de aumento de capacidad, optimizar sistemas productivos, de transporte o logística, analizar fallas y detectar fraudes, entre muchas otras aplicaciones. Durante nuestros años de operación, hemos realizado más de 50 proyectos de simulación. ¿Crees que esta metodología puede ayudar a tu empresa? Conversemos.