Por Ignacia Córdova
En la actualidad es muy fácil adquirir nuevos productos sin movernos de nuestros escritorios. Con un par de clicks nos pueden llegar, en unas horas, los artículos que necesitamos. Con el fin de brindarnos este servicio, las empresas deben tener una área logística fortalecida y robusta donde se optimicen los tiempos y los costos, para que lleguen los paquetes lo más rápido posible a nuestros hogares. De hecho, el 32% de lo que pagas en un producto es su costo logístico (T21Mx.com) y estos, en empresas con un área débil en este ámbito, disminuyen la utilidad de sus ventas en un 30%, afectando en gran medida a las ganancias de la compañía. Otro impacto muy relevante que ha tenido el e-commerce en el último tiempo se encuentra en las calles. Se estima que el 40% del total de tráfico de las ciudades tiene relación con la distribución de envíos.
¿Qué es la Última Milla?
La Última Milla o distribución capilar es la gestión del transporte del último trayecto que se realiza en una entrega de algún producto. Para ser más específicos, la última milla sucede cuando todos los paquetes ya están en el camión y se van distribuyendo por los lugares de entrega a los clientes, llamados zonas o ramificaciones. Este proceso toma en cuenta cada una de las acciones que ocurren desde que el paquete deja el punto de distribución hasta que llega al consumidor.
Debido a que no es un proceso fácil, se debe tener en cuenta factores importantes como la eficiencia y los costos que se incurren en estos procesos. Además existen limitaciones como el tráfico, las restricciones de circulación o la carga máxima que pueden tener ciertos tipos de transportes.
Ejemplos de lugares de delivery en la última milla. Fuente: Research-gate.com
¿Cómo optimizar la Última Milla?
Es por esto, que existen diversas formas de optimizar y gestionar la entrega de productos de forma más eficiente:
- Optimización de rutas: Es muy importante conocer las rutas más eficaces considerando factores como tráfico en tiempo real y calles con obras o cortadas, para así, considerar rutas alternativas cuando ocurran inconvenientes.
- Paquetería y transporte: Existen diferentes tipos de paquetes y formas de manejarlos. Puede ser que algunos paquetes necesiten refrigeración, y por ello, un tipo de transporte especial y no una furgoneta común. También puede ocurrir que algunas cargas sean peligrosas, lo que cambiaría la planificación en cuanto al tipo de transporte, la capacitación del transportista y los elementos de seguridad necesarios para realizar el trayecto.
- Condiciones de entrega: Cuando se adquiere un producto en la web, el cliente recibe un tiempo de entrega máximo y, en algunos casos, en una ventana horaria determinada. Esto es un factor que se debe cumplir en lo posible para dar al cliente el mejor servicio y que quiera volver a comprar en nuestro sitio web o local.
Importancia de la Última Milla
Considerar estos factores es de extrema importancia, puesto que la última milla es la etapa más difícil de la entrega de un producto: es la más costosa, ineficiente y contaminante. Es el único momento donde el cliente final tiene un contacto directo con la empresa que presta el servicio. Se estima que el 80% de los clientes que tienen una mala experiencia en este punto no comprarán de nuevo en la misma plataforma. Igualmente, es muy difícil estimar los costos de cada trayecto y reflejar esto en el precio para el cliente, sobre todo si es muy común conseguir envíos gratis en algunos comercios. También, el plazo de entrega es cada vez más competitivo ya que el cliente es progresivamente más exigente, obligando a las empresas a optimizar este proceso al máximo.
Inteligencia Artificial y Última Milla en soluciones ambientales
Si bien el problema de la Última Milla tiene variadas dimensiones, una muy interesante es el ámbito ambiental. Para resolverlo se utilizan diferentes herramientas donde se destaca principalmente el uso de Inteligencia Artificial (¿Qué es la Inteligencia Artificial?). Con esta herramienta se pueden rastrear las emisiones de carbono durante la entrega del paquete, aunque no se tengan a mano todos los datos necesarios para ello. Esto se realiza estimando los datos faltantes con otras fuentes de información como, por ejemplo, satélites.
Otras posibles aplicaciones son determinar la mejor ruta, el mejor tipo de transporte, gestionar inventarios o mejorar la logística de operación. Se debe tener en cuenta que la Inteligencia Artificial es muy importante para el área de logística ya que es mucho más exacta que los procesos manuales y puede ayudar a asignar de mejor manera los vehículos y planificar las rutas de forma más eficiente.
Para tener una empresa exitosa es fundamental dar a los clientes una buena atención y un exitoso envío de sus productos, optimizando los recursos y organizando esta entrega de la mejor forma posible. La transformación digital es clave en los tiempos actuales, abriendo las posibilidades a un transporte más eficiente, rentable y sustentable. La inteligencia artificial hace posible diseñar rutas, aprovechar el espacio y disponibilidad de los vehículos, entre muchos otros beneficios. ¿Quieres utilizar inteligencia artificial en la logística de tus envíos? Conversemos.